Aparte de la desaceleración del gigante asiático, precios de iPhones al alza, creciente competencia y saturación de mercados maduros explican sus menores proyecciones.
Si bien la cantidad de unidades tiende a crecer menos, las ganancias comienzan a ser mayores. Mientras Samsung consolida su liderazgo, marcas chinas mejoran su posición relativa.
Un reciente artículo en el Wall Street Journal describe un preocupante escenario para Apple en ese continente ante el fuerte crecimiento de fabricantes chinos.